Ya se acercan nuestras fiestas. Este año solo podré estar 3 días. Por primera vez en mi vida no podré estar del 6 al 14. Me da pena, pero qué le vamos a hacer.
También me da pena que Simón Santamaría estará haciendo sus paseíllos y haciendo de las suyas un año más. Reconozco que me da rabia, porque creía que para estas alturas "El Jefe" ya estaría de patitas en la calle con una patada en el culo. Pero como aquí va todo al revés, ahí sigue.
Simón, el 7 del 7 estarás ahí, desfilando en La Procesión, con tu gorra de plato y con las 7 imputaciones siguiéndote como comitiva. Y yo procuraré estar como el año pasado saludándote mientras a tus espaldas tus agentes se reían. Imagino que estarás muy solicitado, pero intentaré que me saludes. Me hará ilusión. ¿Te acuerdas el año pasado? Te saludé, me miraste con esa cara de... de Simón Santamaría, y a los pocos metros te pusiste a cuchichear al oído con uno que tenías a tu derecha. ¿Qué os decíais? A lo mejor tuvisteis una conversación de este estilo: "dile a Polo que mañana se olvide de todas sus obligaciones, porque lo más importante en este momento para la seguridad ciudadana es ir a Monasterio de Irache y que los que estén ahí dejen todo, hagan un informe cañero y de ahí irnos al juzgado a ponerle una querella criminal a ese Imanol Reta de los cojones". Igual el subordinado te contestó "pero jefe, que estamos en plenas fiestas y estos días andamos a tope". Tras un "¿Qué te he dicho?" tuyo, imagino al personaje yendo a decírselo a Polo y volver con su respuesta: "Jefe, Don Ignacio dice que de acuerdo, siempre y cuando para la hora del aperitivo pueda estar por lo viejo cumpliendo con sus obligaciones".
Puede que algunos hayáis pensado al leer el párrafo anterior que se me ha ido la olla con esa absurda suposición. Yo estaría de acuerdo con vosotros de no ser porque el día siguiente, 8 de Julio, Santamaría y Polo, en vez de estar a lo que debían estar en esos días en los que se tienen que dejar de chorradas y centrarse en la seguridad del ciudadano y del visitante, estaban ahí, en el juzgado, denunciándome. Por eso me da la sensación de que en La Procesión a Simón le dio un calentón de los que le suelen dar y dejando de lado sus obligaciones diera total prioridad a una cuestión personal que perfectamente podía haber esperado al día 16 (el 15 no, que tiene que estar al mando de la caballería para evitar que el encierro de la villavesa siembre el terror por las calles).
Eso sí, Simón, que si tú lo crees oportuno, repites lo del año anterior, me metes otra querella y así conviertes ese "acto" en tradición. Mira que curioso, parecido a como empezó el encierro de la villavesa.
Mañana ya no estará Polo contigo, Simón. Estarás tu solo. Con tus 7 imputaciones siguiéndote.
Seguro que el año que viene serás ya parte de la historia vergonzosa de Pamplona/Iruña
